
Recientemente comencé a seguir un blog de una chica que emigraba a Alemania. Comenzó con la preparación del viaje, la emoción de comenzar una nueva aventura buscando una vida y un futuro mejor. Muchos lo hicimos, unos volvimos y otros no lo han hecho.
Cada experiencia tiene tras de si, miles de historias distintas, en ocasiones durísimas, otras muy gratificantes. La vida rutinaria y medida queda atrás para convertirse en una montaña rusa, de la que no ves más allá de donde alcanzan tus manos. Encuentras quien te apoya y quien te desprecia, seleccionas como por arte de magia quien está a tu lado, pues realmente no sabes nada de nadie, ni ellos de ti.
Si hay algo que une a todas las historias es que nadie sabe quien eres, nadie te juzga, nadie conoce tus fracasos, tus méritos ni tus triunfos. Un ser humano que acaba de nacer para un mundo nuevo. Siempre pensé que es como volver a tener tres años, conocer el idioma, las costumbres, las normas….
Esta situación te obliga a ser uno mismo, sin disfraces, sin influencias, y esa es precisamente una de las consecuencias mas positivas que se viven, triunfes o no en aquel país, percibes que siendo tu mismo la vida comienza a fluir, te adaptas o no. Eres capaz o no de soportar tan tremenda soledad y de encontrarte contigo mismo día a día. Y de ello depende enormemente que suceda la adaptación, ya que si no eres capaz de vivir esos momentos, la rendición te obligará a volver a casa.
Cuando inicias la aventura, soportas lo que no harías en cualquier otra situación, sacrificas lo inimaginable y el instinto de supervivencia aparece de una forma sorprendente.
Cuando inicias la aventura, soportas lo que no harías en cualquier otra situación, sacrificas lo inimaginable y el instinto de supervivencia aparece de una forma sorprendente.
Si lloras, si sufres, si te sientes solo y algo frustrado, si todavía te encuentras en ese proceso de encontrar tu lugar en aquel país, puedo decirte que sin embargo:
De todas las cosas que te están sucediendo, sólo recordarás lo bueno cuando te hayas integrado, hecho amigos y creado vínculos personales. Trata de encontrar personas positivas que aporten algo bueno a tu aventura, las ganas de volver a ver a tus amigos y familia con el tiempo se calman como el hambre cuando se aleja de la hora de la comida. Un día no querrás volver, y ese día llega sin esperarlo.
Quien te conozca ahora lo hará por lo que eres, no por lo que eras o serás, vive el presente, no desaproveches la oportunidad de mostrar todo lo bueno que llevas dentro.
Mucho ánimo con tu aventura, si vas a comenzarla, o estas en ella. Muchos lo hemos vivido y conseguido, y si, es cierto, nunca más serás la misma, creo que serás mejor, más tolerante y ciudadana del mundo.
Con este post quiero darle ánimos a Patricia, una joven española valiente que se lanzó a la aventura de emigrar, llena de optimismo y alegría….
En su blog » www.unaespañolaenfrackfurt. wordpress.com » deja cada momento de sus vivencias, una buena forma de no perder el rastro a sus emociones y vivencias, positivas o negativas, y quien sabe, ser útil a quien quiera seguir sus pasos o prevenir a los que no sienten el valor de dar el salto.
¡!Un abrazo Patricia¡!

Javier
diciembre 9, 2012Emigrar debe considerarse debe ser una oportunidad para mejorar, no como un fracaso, de la que se aprenden cosas que de otra forma nunca se llegarían a entender…ánimo a todos aquellos que tienen el valor de hacerlo!
espanolaenfrankfurt
diciembre 9, 2012¡Muchas gracias por el post, Lola!
Como bien dice Javier, emigrar debe considerarse una oportunidad para mejorar y todas las personas que conozco que lo han hecho siempre, si regresan, vuelven con otra percepción. Yo misma ya tengo otra percepción de muchas cosas, llevando tan solo tres meses en Alemania.
Empecé el blog por un lado porque quería informarme y dar algo de información, aunque al llegar aqui me he dado cuenta que las cosas cambian un poco y cada Land es un mundo…También, por terapia personal, porque sabía que esto iba a ser duro, y lo es, pero no es tan duro en el sentido que pensaba. Me siento cómoda en Alemania, aunque no toda Alemania es igual (me ha gustado vivir en Frankfurt y por eso vuelvo, no me gusta Colonia y me gustaría vivir en Berlín) pero lo que peor se lleva es tener una posición de clase media en España sin demasiados problemas y aquí no poder casi ni alquilar una habitación porque no tienes un contrato de trabajo.
He de reconocer que en parte vine con el encanto ese de «empezar de 0» pero no era consciente que ese «empezar de 0» conlleva muchas dificultades. Por ejemplo, nadie te conoce ni del colegio ni de la universidad, nadie del país te puede «avalar», hay muchas dificultades para entrar en la sociedad vía trabajo hasta que no sabes medianamente algo de alemán…Y todo eso no lo sabemos hasta que lo vivimos porque antes lo puedes imaginar pero no sabes lo que se sufre.
Gracias Lola, por este post. Se que hay mucha gente como yo y también tengo que decir que en muchas cosas, aunque me sienta mal a veces estoy teniendo suerte. Alemania es un país complicado para formar parte de él por la barrera del idioma. Creo que si no fuera por eso podría tener trabajo fácilmente de lo mismo que hacía en España. Pero, a pesar de todo, por ahora todo esto me compensa y creo que merece la pena
lolacebolla
diciembre 9, 2012No conocer a nadie, ni tener conocidos, del colegio, de la familia, es una de las partes más duras, la ausencia de referencias…. Y de las personas que conozco, realmente todos pensamos así, no todas las ciudades en un mismo país son iguales… Te continuo leyendo, y desde aquí te deseo lo mejor!! Bss
espanolaenfrankfurt
diciembre 9, 2012Reblogged this on Una española en Frankfurt, hallo Deutschland! and commented:
¡Gracias Lola!
Marta Vázquez Sellán
febrero 26, 2013Gran artículo Lola. Desafortunadamente no he tenido la fortuna de vivir fuera de España, ni siquiera temporalmente, pero sí creo que es una actitud muy valiente, tanto por tu parte como por la de cualquier otra persona, salir de tu país y empezar de nuevo en otro, aunque finalmente hayas decidido volver. Nos seguimos leyendo en Twitter, un beso, Marta.
lolacebolla
febrero 26, 2013Gracias por tu comentario Marta, hay veces que es una opción y en otras ocasiones las decisiones se toman prácticamente por obligación, no cabe duda que en cualquiera de los casos es una experiencia, y siempre se puede extraer algo positivo, un abrazo.
Patricia
abril 9, 2013Querida Lola,
sigo en esta aventura. Ya llevo más de seis meses en Alemania y pensaba que lo peor había pasado porque ya no me siento aislada (ya hablo suficiente para poder comunicar lo que quiero), ya puedo resolver cualquier tipo de problema,etc. O sea, una vida más o menos normal. Ahora ya llegó el momento de buscar en serio trabajo y en eso estoy a la vez que sigo estudiando alemán (cosa que es imprescindible aquí y es lo que te abre o no las puertas) pero ya he sentido la necesidad de calor humano, la dureza del desarraigo, el no tener nadie de confianza cerca,…Después de tanto tiempo siempre con la adrenalina a tope, una etapa más tranquila ha llegado y es cuando te das cuenta de las carencias que tienes.
Un abrazo
Jefferson
abril 12, 2015Hola Lola, yo también he tenido la suerte de emigrar,vivo en España hace ya 11 años,y lo que dices es muy cierto,hay momentos duros pero muchísimos mas momentos buenos.
Mí antídoto para los momentos duros siempre ha sido recordarme el porque quise venirme aquí y arriesgarlo todo,y la verdad es que me ha sido de gran ayuda.
Patricia te deseo mucha suerte y que sigas aprovechando tu experiencia al máximo.